Sicilia: Catania en 1 día

 

Arrasada hasta en 7 ocasiones por fuertes terremotos y erupciones volcánicas por estar situada a los pies del volcán Etna, es la segunda de las ciudades más importantes de Sicilia después de Palermo.

Hogar de multitud de pueblos desde que los griegos llegasen por primera vez a la isla, en sus calles conviven construcciones romanas, bizantinas, árabes e incluso aragonesas.

Esta ciudad plagada de pequeñas iglesias, y con la Universidad más importante del país, oculta entre sus calles multitud de emotivas historias populares y rincones curiosos ¡Benvenuti a Catania!

 

Comienzo mi recorrido en Piazza Università, donde se encuentran el Palazzo dell´Universitá y el Palazzo San Giuliano, cuyas fachadas y patios son dignos de admirar.

 

Esta plaza barroca es curiosa por dos razones. En primer lugar porque el suelo está hecho completamente de piedra de lava. Y en segundo, porque las 4 farolas de bronce que la rodean representan 4 famosos personajes de las historias populares de Catania.

 

La joven Gammazita, el marinero Cola Perce con habilidades bajo el agua, los piadosos hermanos Anfinomo y Anapia, y el legendario paladín Uzeta. El emblema de la ciudad está ubicado en el centro.

 

- Gammazita era una bella joven prometida de la que se enamoró locamente un soldado francés llamado Droetto. Ella siempre lo esquivaba y salía acompañada para no cruzárselo, pero un día que fue a por agua a un pozo cercano al Castello, Drotto la persiguió y la abordó. Ella, asustada, decidió lanzarse al pozo antes que deshonrar su compromiso y perder su virtud. Los habitantes, para encontrar a Droetto, hicieron pronunciar la palabra “ciciri” (garbanzo), muy difícil de decir de pronunciar a no ser que se hable el dialecto de Catania, a los viandantes de la zona hasta que lo encontraron.

 

- Los hermanos Anfinomo y Anapia eran dos campesinos de las tierras del Etna que vivían con sus ancianos padres y que fueron sorprendidos por una erupción volcánica mientras se preparaban para arar. Pero en vez de salir corriendo, volvieron a por sus padres a quienes cargaron en hombros ralentizando de este modo su huida. Cuando la lava del volcán estaba a punto de atraparlos, el rio de fuego se dividió en dos y volvió a unirse delante de ellos, dejando a salvo a los hermanos y sus padres. Se cuenta que gracias a esta hazaña que conmovió al país, se les esculpieron estatuas, crearon monedas con sus rostros y se erigieron templos en su honor.

 

- El paladin Uzeta era un joven de orígenes humildes que se enfrentó a los gigantes Ursini, que habitaban el Castillo Ursino (de ahí el nombre). Esta empresa le valió el agradecimiento del rey Federico II y la mano de la princesa.

 

- La historia del marinero Cola de Pez es posiblemente la historia más conocida de Sicilia. Cuenta la historia que este marinero era capaz de vivir bajo el agua durante días e incluso meses. El rey Federico II, impresionado por esta cualidad le hizo llamar y le mandó recoger varios objetos que lanzó el rey a las profundidades del océano desde un acantilado. Cola de Pez regresó con cada una de ellas, contándole además al rey las maravillas del fondo submarino. En una de sus zambullidas descubrió que la isla estaba sujeta por 3 columnas y que la que sostenía la parte de Messina estaba agrietada y a punto de ceder. El rey le pidió que hiciera un reconocimiento más exhaustivo de la columna. Este, algo cansado volvió a bajar con un puñado de lentejas, indicando al rey que si las lentejas llegaban a la superficie quería decir que había muerto en el intento. El tiempo pasó y las lentejas subieron a la superficie. Según la leyenda, Cola de Pez sustituyó a la columna agrietada y sigue vivo en las profundidades del mar. También se cuenta que los terremotos que sufre la isla son causa del cambio de hombro de sujeción de la columna que Cola de Pez realiza cuando se cansa.

 

De todos modos os dejo en mi web las historias completas por si os apetece leerlas.

 

Muy cerca está el Teatro Massimo Vincenzo Bellini, en la plaza con el mismo nombre, con una preciosa fachada.

 

Y tras la Piazza Università se encuentra Piazza Duomo con la barroca Catedral de Santa Agata, la joven virgen sometida a grandes martirios por el cónsul romano que decidió dar su vida antes de renunciar a su fe, y hoy patrona de la ciudad, cuyas reliquias se encuentran en el interior del templo. También se encuentra en su interior la tumba del compositor Vincenzo Bellini, el Cisne de Catania e hijo predilecto de la ciudad. Horario de apertura de 7:00 a 12:00 y de 16:00 a 19:00 (festivos de 7:30 a 12:30 y de 16:30 a 19:00).

 

En Piazza Duomo también se hayan el Palazzo degli elefanti (Palacio de los Elefantes), actual ayuntamiento y el Palazzo dei Chierici (Palacio de los Clérigos).

 

“En el centro de la plaza llama la atención la Fontana dell´Elefante, cuyo pequeño elefante está tallado en una piedra volcánica sobre la que reposa un obelisco egipcio. El Elefante es símbolo de la ciudad porque al parecer en un pasado remoto hubo elefantes enanos en la isla. La leyenda cuenta que esta escultura tiene el poder de calmar la ira del Etna.”

 

En una pequeña esquina de la plaza se encuentra otra fuente, la Fontana dell´Amenano.

 

El Amenano fue el rio de Catania que quedó soterrado tras el terremoto de 1693 y que solo es visible en este pequeño tramo dentro de la misma fuente. Muy cerca, el restaurante A Putia Dell`Ostello (Piazza Curró 1), tiene un sòtano con una cueva donde se aprecia el recorrido del rio. Si quieres ver la cueva, cobran 1€ por la visita.

Aquí puedes tomarte algo en una atmósfera única. No es económico, pero si original. Se encuentra en una plaza entre la Pescheria y el Castello Ursino.

 

A pocos metros de Piazza Duomo, en Via Vittorio Emanuele II, 182, se encuentra la Chiesa della Badia di Sant´Agata. Por 3€ se puede subir a la cúpula donde las vistas 360 grados de la ciudad son impresionantes.

 

Justo al lado se encuentra el Museo Diocesano (Piazza Duomo, 8), donde se pueden visitar las Termas Achilliane, del siglo IV o V, y cuyas ruinas se encuentran bajo el suelo debido a los devastadores terremotos de 1169 y 1693. Fiueron descubiertos por el Príncipe Biscari, arqueólogo que también descubrió otros muchos edificios ocultos de Catania. Horario de lunea a viernes de 9:00 a 14:00 y martes y jueves por la tarde también de 15:00 a 18:00, sabados de 9:00 a 13:00, y domingos y festivos bajo reserva previa a grupos de mínimo 20 personas. Precio Museo 7€ y termas 5€, estudiantes, jubilados y grupos de al menos 10 personas 4€ y 3€, y niños gratis.

 

Pasada la plaza está la Pescheria, un mercado callejero de pescado fresco y el Mercado de la Fiera, con otros muchos puestos de productos típicos de la región. Aquì encontraréis el verdadero alma de la ciudad, que todavía conserva los olores y sabores de los zocos árabes.

 

A unos pasos se alza una de las antiguas puertas de la ciudad, La Porta Uzeda, que separa la calle de los mercados de la Piazza Duomo.

 

Alejándome un poco de esta zona me dirijo hacia el Castello Ursino, otro de los símbolos de la ciudad. Horario de 9:00 a 19:00 (Cierre de taquilla a las 18:00). Precio 6€.

 

Convertido en residencia real, fue la primera sede del Parlamento de Sicilia y posteriormente cárcel y cuartel militar. Este castillo se construyó al borde de un acantilado que hoy en día no existe debido a los movimientos sísmicos que ha sufrido la isla desde entonces que lo ha separado de la costa casi 1 km.

En una de las fachadas laterales se pueden ver marcas hechas por maestros judíos, cristianos y árabes símbolo de su fe religiosa.

 

En frente de la entrada del castillo, hay una placita y antiguo aparcamiento que desde hace un tiempo, gracias a una asociación cultural del barrio (Gammazita), se ha convertido en una biblioteca al aire libre con palés y banquetas de madera, donde en verano hay vecinos que se incluso traen sus propias sillas de lo concurrido que está. Aquí puedes coger un libro y pasar las horas relajadamente.

 

Muy cerca se encuentra también la Antiga Botega dei Pupari (Via Reitano 55), taller y museo de títeres sicilianos con mucha historia. Visita guiada bajo reserva. http://www.fratellinapoli.it. Yo la encontré cerrada temporalmente.

 

Volviendo hacia el centro me dirijo hacia las Ruinas del Teatro Romano de Catania. Este teatro se construyó sobre un teatro griego con roca de lava del Etna recubierta de mármol y con capacidad para unas 5000 personas. El espacio de enfrente de la escena está sumergido por otro tramo visible del rio Amenano, antiguamente canalizado para inundar toda esta parte del teatro en los espectáculos navales.

 

Paralela a Piazza Duomo se encuentra Via Crociferi, la calle de las iglesias, donde en apenas unos metros podemos contar hasta 6 iglesias. Así que si os gustan las iglesias, esta es vuestra calle:

 

- San Martino dei Bianchi

- San Francesco de Assis

- San Benedetto

- San Francesco Bogia

- San Giuliano

- San Camilo

 

La siguiente parada es el Monasterio dei Benedettini di San Nicolò l´Arena, el segundo más grande de Europa y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Hoy es parte de la universidad, y además de la belleza del edificio, tiene algunos de los jardines más bonitos de la ciudad. Sobre todo el de su patio central, el Jardín de los Novicios, donde se reúnen los universitarios en sus descansos.

 

Uno de los edificios junto al monasterio que no debéis dejar de visitar y que pasan desapercibidas para la mayor parte de los turistas es la Biblioteca Ursino Recupero, una increíble biblioteca del tardío barroco siciliano que os dejará sin palabras. Horario de 9.00 a 13.00.

 

Entre el edificio del Monasterio y la Biblioteca, al principio Via Biblioteca, se encuentra otro de los jardines más bonitos de la ciudad. Y en frente del Monasterio, en la Piazza Dante, suele haber gran variedad de puestos de comida para llevar.

 

Cerca, se encuentra el Bastione degli Infetti (Via Torre de Vescovo 3), algunos de los restos de la antigua muralla greco romana que permanece enterrada entre los edificios de alrededor. Es un lugar poco conocido, pero que no está de más visitarlo de camino a Anfiteatro Romano.

 

En el centro de la Piazza Stesicoro se encuentra el Anfiteatro Romano de Catania, el segundo más grande de Italia después del Coliseo de Roma, y en un estado lamentable.

Solo es visible un pequeño trozo del Anfiteatro en sí, que se encuentra bajo los edificios contiguos, y tenía una capacidad para 15.000 espectadores sentados, casi el doble si contamos con los que cabían también de pie.

Tras la ocupación de los vándalos, fue saqueado, y la estructura fue utilizada por los ciudadanos para construir sus casas, inclusos varias de las piezas de mármol que recubrían la roca volcánica de las gradas se usaron en la construcción de la Catedral, que se pueden ver en la parte externa del ábside que se accede por la calle Vittorio Emanuele 159. 

A unas calles se encuentra Catania Living Lab (Via Manzoni 91/D), donde, gracias a su proyecto, se puede ver una reconstrucción 3D de 360 grados del Anfiteatro Romano, además de algunas partes faltantes.” Horario de lunes a viernes de 9.30 a 12.30 y de 17.00 a 19.00.

 

Subiendo por Via Etnea, la calle más comercial de Catania con unas impresionantes vistas con el volcán Etna de fondo, me dirijo hacia Villa Bellini, uno de los pulmones verdes de la ciudad y el parque más visitado. En frente se encuentra una de las pastelerías más conocidas de la ciudad, la Pasticceria Savia, donde uno puede probar cualquiera de dulces típicos de la zona.

 

A unas calles, se encuentra otros de los mercados estilo zoco árabe de la ciudad, el Mercado de la Piazza Carlo Alberto di Savoia, con puestos de quesos sicilianos además de puestos de ropa, música y otros. Es curioso pasear y ver el ambiente que se respira. Aquì tambièn se encuentra el Santuario della Madonna del Carmine.

 

 

Consejos de Viaje.

¿Qué comer y beber en Catania?

 

Sicilia en general es un paraíso gastronómico, y más si te gusta la pasta como es mi caso.

 

El desayuno típico siciliano es la granita de mandorla (una especia de granizado muy suave de diversos sabores) y un pan o bollito brioche. Yo tuve la oportunidad de probarlo y me encantó. También se puede disfrutar de una deliciosa granita a cualquier hora del día.

 

Los platos típicos sicilianos son en la mayoría platos tradicionales italianos con ingredientes del mar, como no podía ser de otro modo. Por lo que si pedís platos tales como pizza, pasta o risoto, que sea de marisco.

 

Son muy típicos los platos de marisco, pescado frito y los arancini, bolas de arroz rebozadas al estilo de una croqueta con diversos ingredientes.

 

Los postres típicos de la región son los ya mencionados cannoli, el gelato italiano y la cassata siciliana, con bizcocho, pasta de almendra, queso ricotta y trocitos de fruta confitada… una bomba dulce.

 

Como dato, si os gusta el pistacho, es un ingrediente que está presente en multitud de platos sicilianos. También lo encontraréis a granel en todos los mercados del país.

 

La Pasta a la Norma es un plato que hay que probar en Catania. Es su plato más tradicional, cuyo nombre es en honor a una obra de su famoso músico local, Bellini.

 

De beber, a parte de los típicos y buenísimos vinos de cada región de Sicilia, son muy comunes también los licores de fruta como el limoncello o el mandarinetto y la crema di pistacchio.

 

También hay una bebida que venden en muchos puestos ambulantes a base de zumo de limón o mandarina, soda y sal llamada Seltz. 

 

 

Zonas para comer, cenar y tomar algo 

 

Para comer, uno de los lugares de comida típica de la zona, y de los que ya no queda casi ninguno, está el Bar Putia du Calabrisi (Via della Concordia 185), algo alejado del centro.

 

Una zona de moda para cenar y tomar algo es Via Santa Filomena, en una paralela a Via Etnea a la altura de Villa Bellini, aunque se trata de un lugar turístico.

 

Uno de los barrios más jóvenes y alternativos, es el recientemente reformado San Berillo, antiguo Barrio Rojo de la ciudad, en cuya plaza y alrededores se puede cenar y tomar algo con un ambiente joven y al mismo tiempo tradicional.

 

Cerca de  Piazza Università, se encuentra uno de los lugares alternativos más conocidos de la ciudad, el Bar Nievski (Via Alessi 15-17). Es el lugar perfecto para relajarse y tomar algo. Horario de 17.30 a 2.00. Esta misma calle y algunas cercanas a esta están consideradas como la zona “gay” de Catania.